Proyecto de Restauración
Para evitar llevar a cabo una restauración que tuviera un efecto negativo sobre la biodiversidad ya asentada en el espacio y dado que las alternativas de restauración pueden ser múltiples en función del uso que se proponga para el terreno restaurado, la empresa minera Holcim llevó a cabo una modificación del Plan de Restauración vigente. En esta modificación, y a través de una novedosa fórmula de colaboración con un grupo multidisciplinar de expertos de diferentes organizaciones, empresas y personal académico para el desarrollo de restauraciones ecológicas, Holcim contó con la ONG conservacionista Brinzal como asesoría técnica en lo relativo a biodiversidad.
Se optó por una restauración ecológica novedosa que aprovechara las oportunidades creadas para la biodiversidad, generando unos valores especiales en el terreno que ocupó la cantera.
Zonificación de las principales actuaciones de restauración morfológica y revegetación propuestas en el nuevo Plan de Restauración de la Chanta.
La ejecución de las actividades de restauración se desarrolló en 2020, y fueron llevadas a cabo por un equipo multidisciplinar de expertos: la empresa Cinclus, que ejecuta restauraciones en ámbito minero desde hace más de dos décadas; Teilluris Consultores, que trabajan en consultoría de sostenibilidad; HELIO Ingeniería, encargada de la dirección facultativa minera del proyecto; Sodira, empresa minera especializada en movimientos de tierras y Esguilatorres, una pequeña empresa especializada en trabajos en altura.
En marzo de 2021 se firmó un acuerdo de custodia por 5 años y prorrogable en usufructo entre Holcim España y Brinzal.
Restauración con objetivos claros: fomento de biodiversidad
Los movimientos de tierras estuvieron encaminados a disminuir la erosión, reducir las pendientes, naturalizar el espacio, construir isletas, adecuar orillas, etc. La actuación más peculiar probablemente haya sido el uso de la herramienta Geofluv en la modelización de una extensa superficie enormemente compactada por el paso de maquinaria pesada entre los frentes de la cantera y la planta de procesamiento. Hoy la zona está formada por microcuencas que dirigen el agua hacia los dos humedales sin arrastrar materiales que los acabarían colmatando. Se evita de este modo la formación de cárcavas y otros procesos erosivos.
En relación al fomento de biodiversidad, se trabajó específicamente con los grupos taxonómicos objetivo, por ejemplo en el diseño de la morfología de los humedales para favorecer a los anfibios suavizando orillas, proveyendo diferentes profundidades y ambientes, etc.
Aprovechando la naturaleza arcillosa del terreno, se construyó además un buen número de charcas temporales. Estas son utilizadas, además de por los anfibios, por un variado grupo de especies: libélulas, mariposas que liban minerales, aves y mamíferos para beber, etc.
Se pusieron a disposición una variedad de refugios y nidos artificiales para fauna: vivares para conejo de monte, nidos artificiales para golondrina, avión común, vencejo, etc., cajas nido para paseriformes, autillo, mochuelo, cernícalo primilla, etc. y una variedad de refugios para murciélagos. Algunos de estos refugios se situaron en postes, otros en infraestructuras de la zona de uso público, en árboles, etc.
Pero sin duda la ubicación más peculiar la constituye un muro donde se situaba la machacadora de la explotación y que se quiso conservar como estructura en la que situar nidos para hirundínidos coloniales, vencejos, cernícalos y murciélagos. En su parte inferior se construyó una colonia artificial para avión zapador, una especie fuertemente asociada a las canteras en nuestra comunidad.
Otra de las actuaciones más llamativas ha sido la construcción de un nido para grandes águilas en los frentes rocosos preservados.
En relación a los polinizadores, se han instalado cajas nido para abejorros, protegidos por majanos de piedra. El acceso se produce a través de un tubo enterrado y en su interior se ha simulado un nido de ratón. También se han instalado pequeños hoteles para abejas solitarias.
En cuanto a la revegetación, se trabajó de forma intensa en la selección de especies autóctonas y la promoción de uso de semilla nativa de la región de procedencia de la Alcarria alcanzando un número de más de 100 especies entre herbáceas, arbustivas y arbóreas. Se propuso un modelo de restauración ecológica a través de las soluciones basadas en la naturaleza, intentando reproducir en el terreno de la cantera diferentes etapas seriales de la vegetación potencial y climatófila que se daría de forma natural. Los casi 7000 plantones utilizados provienen de viveros que usan semilla de origen centro peninsular.
Se realizó también una siembra de una parcela de variedades antiguas y locales de gramíneas (centeno gigantón, espelta) y leguminosas (yeros, almortas, titarros) para favorecer tanto a las aves esteparias como al conejo de monte, así como siembras de semillas nativas para favorecer la presencia de polinizadores y la plantación y siembra de diferentes especies de plantas nutricias para 6 especies de lepidópteros catalogados.
El proyecto de restauración aún continúa, seguimos plantando, sembrando y promoviendo la biodiversidad con diferentes actuaciones.
Uso público
Otro de los objetivos principales de este proyecto de restauración ha sido dotar el espacio de infraestructuras que posibiliten llevar a cabo actividades de investigación, conservación y educación mediante un proyecto acorde con los valores de conservación.
En definitiva, se trata de un modelo de restauración minera en pro de la biodiversidad, que ya está siendo mostrado y difundido entre empresas del sector.